La primera vez que un líder de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (Mormón o SUD) me mintió, no sabía qué estaba pasando. Estuve en una apertura de un templo mormón en México, y después de haber tomado el tour del templo, un grupo pequeño de nosotros estuvimos ahí hablando – una mezcla de visitantes, algunos mormones y otros no-mormones, y un líder SUD con su traje oscuro tradicional. Cuando le pregunté de la enseñanza mormona sobre Dios—la que dice que Dios antes fue hombre como nosotros y que tuvo que progresarse a la Divinidad—él inmediatamente lo negó. Me quedé sorprendido; esto era algo que yo había visto documentado en numerosas fuentes SUD. Así que le pregunté si estaba seguro, y cité de memoria lo mejor que pude la enseñanza de José Smith. Esto también lo negó, diciendo que realmente no fue una enseñanza de la iglesia SUD. Como yo no tenia la fuente a la mano tampoco pude discutir más, pero sí me preguntaba si fuera posible que un líder en Latinoamérica tal vez no supiera algo tan básico de la doctrina SUD.
Ahora adelantamos seis a ocho meses. Un país diferente en Latinoamérica, pero un escenario muy similar. Esta vez hubo varios líderes mormones en un grupo de tal vez ocho a diez personas. Cuando nos preguntaron a los que no éramos mormones qué objeciones teníamos con la iglesia SUD, mencioné la enseñanza de SUD que según José Smith, Dios no siempre había sido Dios, pero una vez fue hombre como nosotros. El hecho de que José había enseñado esta doctrina fue inmediatamente y fuertemente negado por ellos. Una vez más cité a José Smith afirmando que Dios no siempre había sido Dios, pero que una vez fue hombre como nosotros. Esta declaración también fue negado fuertemente y me acusaron a mí por repetir falsedades anti-mormones. Una vez más no estaba seguro si ellos verdaderamente no sabían de esta información, así que saqué mi copia de Enseñanzas del Profeta José Smith y fui a la página 427. Sin embargo, tan pronto empecé a leer, lo que ellos habían fuertemente negando, ahora empezaron a afirmar. Admito que me quedé un poco pasmado. Su negación de la doctrina fue una mentira.
Fue mi primer encuentro con lo que yo llamo una cultura mormona de engaño. Después de más de 25 años de tener asociaciones amistosas con y ministrar a personas de la iglesia SUD en todas partes del mundo, puedo decir que tal engaño verdaderamente forma una parte significante de la cultura SUD.
Defender con Engaños
Dentro del contexto Latinoamericano toma dos formas. La primera es lo que yo he experimentado numerosas veces con personas dentro del SUD en diferentes niveles de autoridad. Un mormón negará, minimizará, o disfrazará ciertas enseñanzas oficiales o puntos de historia SUD que él sabe que son verdad, para poder proteger a la imagen de la iglesia SUD o sus líderes. Los mormones mismos se refieren a esto como “mentir para el Señor” y aunque esto no ha sido enseñado oficialmente como una doctrina o una práctica, se reconoce por líderes laicos y aún por apóstoles. (Haga una búsqueda en el sitio web de Google con la frase “lying for the Lord, mormon” para ver numerosos artículos y presentaciones de video que documentan el concepto y la práctica de esto.)
Tal vez uno de los ejemplos más flagrantes fue cuando el Autoridad General SUD Enrique Falabella desvió a un corresponsal de la prensa durante una entrevista en la televisión. Cuando al Elder Falabella le preguntaron si los mormones no se dedican a algunas prácticas raras y no-cristianas en sus templos, él citó la distinción de “lo sagrado no secreto” y después declaró que durante sus casas abiertas La Iglesia Mormona revela todo lo que sucede en el templo. Fue un engaño atrevido y contradijo de plano a otro Elder Mormón, el Apóstol SUD Boyd Packer, quien escribió en su libreta El Templo Santo (p.2) que la Iglesia SUD no revela las cosas que suceden en el templo a personas fuera del SUD y los miembros SUD deben mantener esas cosas “confidencial”.
Engaño de un género diferente
Sin embargo, un aspecto diferente y para mí más preocupante de la cultura de engaño SUD es la evidencia que indica que los líderes SUD están desviando a su propia gente en Latinoamérica en cuanto a ciertos hechos históricos inquietantes. Hace un tiempo atrás estuve en Honduras haciendo una serie de conferencias de enseñanza y entrenamiento para pastores y líderes cristianos allí. También asistí a la casa abierta del templo mormón y estuve en la gira que dan del templo y aproveché la oportunidad para hablar con los miembros hispanos de la iglesia SUD. Mi meta no fue discutir o debatir, y realmente las conversaciones por lo general fueron muy amables. Por haber vivido en Venezuela de joven hablo un fluido español y disfruto de la cultura hispana. Así que me siento muy en casa dentro del contexto latinoamericano. Pero mientras hablaba yo con diferentes personas mormonas, especialmente los que eran adeptos y no nacido dentro de la iglesia SUD, descubrí una tendencia perturbadora. Cuando yo empezaba a hablar de cuestiones que ponía en duda la integridad profética de los primeros líderes como José Smith y Brigham Young, noté dos cosas:
¿Que decir? Se ha documentado ampliamente las relaciones sexuales de tanto José como Brigham y esto ya se admite en la página oficial de la iglesia SUD - aquí en español. Sin embargo, aun esta página de la iglesia SUD demuestra como los lideres mormones no tratan con completa honestidad la situación. Para un análisis de los problemas con el artículo vea este artículo en inglés.
Bueno, en ese momento yo no tenía razón para dudar de la sinceridad de esta mujer, o la de otras personas SUD amables y dedicadas con los cuales yo hablaba. Además, no traía conmigo los libros que documentan estos hechos. Sin embargo, si no me estaban mintiendo, entonces alguien estaba diciendo mentiras a ellos. Todo esto subraya que los líderes SUD están dispuestos a cualquier cosa con tal de proteger la imagen de la Iglesia SUD en la vista de los miembros en los países de Latinoamérica. Tal nivel de engaño es algo nuevo en mis 15 años de ministerio en Latinoamérica, porque significa que personas SUD a nivel de influencia están dando porciones de información histórica correcta, pero entonces enseñan a estos mismos miembros que la información es falsa.
Se Requiere Un Cuidado Compasivo
Porque mi meta en ese momento no fue discutir, simplemente animé a la mujer a seguir investigando y por lo menos planté la semilla de que a ella le estaban desviando de la verdad. Expliqué que los hechos que ella pensaba que eran falsos eran actualmente conocimiento común, aún entre gente SUD, en los Estados Unidos. Le di mi tarjeta con nuestro sitio web esperando que algún día ella llegará a investigar por sí misma. Este encuentro subrayó la necesidad de una respuesta compasiva, paciente y bondadosa para con personas de la fe mormona, especialmente los que están fuera de los Estados Unidos y que tal vez no tienen acceso a la documentación que está más disponible en inglés. Tales personas no tienen que ser arengadas, menospreciadas o ridiculizadas por lo que les han enseñado. Si nuestra respuesta es dura, discutidora o degradante, disminuimos nuestra efectividad a casi una nada.
Las personas necesitan ver a nuestros corazones motivados por un amor para ellos y un amor por la verdad. 2 Timoteo 2:24-26 dice que no debemos ser contenciosos, sino amables para con todos. Es la bondad de Dios que dirige a las personas al arrepentimiento, y nuestra amabilidad y gentileza pueden tener un impacto más grande que la información basada en datos objetivos que presentamos. Un amigo cercano una vez dijo que más allá de lo que decimos o aún hacemos, las personas se van a acordar más de cómo les hicimos sentir. ¿Las personas con quienes interactuamos se sienten cuidadas y respetadas, aún cuando saben que no estamos de acuerdo o nos sentimos preocupados por las cosas que han sido enseñados? Como mi amigo y pastor Louie Konopka ha dicho muchas veces, “Es muy triste tener la razón, solamente.” Necesitamos compartir la verdad, porque solamente la verdad hará libre a las personas; pero un corazón de compasión no utilizará la verdad en una misión espiritual de ‘ubicar y eliminar’ sino para rescatar y restaurar.
Traducción: Sarah Rodríguez y Joel B Groat
Joel B. Groat es Director de Ministerios para el Instituto para a Investigación Religiosa (IRR.org). Está disponible para entrevistas y conferencias en español o en inglés y puede ser contactado por correo aquí.