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La Biblia enseña que un Dios creó y gobierna el mundo, y que los seres humanos son criaturas finitas las cuales Dios hizo (Génesis 1-2). El Nuevo Testamento revela a este Dios en tres Personas: el Padre, Hijo, y Espíritu Santo (por ejemplo, Mateo 28:19; 2 Corintios 13:14). El Hijo, como el Padre, siempre ha sido Dios y se humilló haciéndose hombre para redimirnos de nuestros pecados. A través de esa redención, nosotros podemos ser perfectos, inmortales y glorificadas criaturas, pero nunca seremos Dioses de la misma naturaleza infinita como el Padre. Más que ser su descendencia literal, nosotros somos criaturas a quienes Dios creó para tener una relación con él – como la de un niño a un padre, y él nos adopta como sus hijos a través de la fe en su eterno y divino Hijo Jesucristo (vea a Romanos 8:14-30).
La vista mormona de Dios y el hombre es radicalmente diferente a la de la Biblia. Según las enseñanzas de la Iglesia SUD, Dios el Padre tiene una esposa, nuestra Madre Celestial. Todos los seres humanos preexistieron en el cielo como los niños espirituales de estos padres celestiales. Jesucristo es su hijo espiritual primogénito y nuestro hermano mayor espiritual, y él es el primero de nosotros en convertirse en Dios. Así, el Padre Celestial, Jesucristo, y el Espíritu Santo son tres Dioses separados. Todos los seres humanos, todos los ángeles, y el diablo y todos los seres demoniacos son los niños espirituales del Padre Celestial; todos somos de la misma "especie" como Dios. Jesús y Lucifer ambos eran nuestros hermanos espíritu en el cielo, pero Lucifer se cayó y se volvió Satanás porque él eligió la mala opción de rechazar el plan del Padre Celestial. En ese plan, fuimos enviados a este mundo para hacer el progreso espiritual en la esperanza de volver a "casa" al reino celestial y en el futuro ser Dioses nosotros mismos, como Jesucristo y como el Padre Celestial, quien también atravesó la mortalidad humana y después se exaltó como un Dios.
La teología mormona radicalmente contradice la doctrina cristiana tradicional basada en la Biblia. Además, el análisis histórico de las revelaciones y enseñanzas de Joseph Smith demuestra que éstas eran innovaciones doctrinales artificiales que él desarrolló gradualmente durante sus años como el profeta de la religión mormona.
Tenemos una amplia colección de artículos sobre la naturaleza de Dios y el hombre, comparando y contrastando la teología mormona con las enseñanzas de la Biblia. Nuestro sitio web también tiene un gran número de artículos sobre la doctrina de la Trinidad, un punto importante de diferencia entre el mormonismo y el cristianismo bíblico-tradicional.
Para un resumen de las doce razones con los enlaces a los artículos en cada uno, vea el artículo principal, "Por qué el cristianismo es verdadero, pero el mormonismo no: Una docena de razones".