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Al examinar cuidadosamente la Biblia en cualquier de sus varias traducciones al español, se nota varios nombres que se usan para Deidad. Los tres nombres principales son: Dios, Jehová, y Señor. Estos tres se usan en su forma separado [Dios] y también en forma combinado [Jehová Dios]. Son traducidos del hebreo, el idioma en que fue escrito el Antiguo Testamento. Las tres palabras principales en hebreo que hablan de Dios son: Elohim, Jehová y Adonai.
El propósito de este articulo es examinar estos tres nombres para Deidad y como son utilizados en la Biblia para hablar de Dios.
Elohim. Esto es el nombre general en el idioma de hebreo para Deidad. Designa a Dios como nuestro Creador y el objeto de toda adoración verdadera. Esta palabra ocurre 2,570 veces en el Antiguo Testamento.1 Es traducido como "Dios" en la Biblia Reina Valera. Elohim es plural en su forma gramática, sin embargo, cuando se refiere al Dios verdadero, designa sólo un Ser Divino. Sabemos esto porque se usa en forma consistente con verbos singulares, y con adjetivos y pronombres en el singular. Así que, de acuerdo con las reglas de la gramática hebrea se deba entender y debe ser traducido como singular.2
Dado que Elohim es un término general para Dios, se usa también cuando se describe dioses falsos. Por ejemplo, Éxodo 20:2-3 declara: “Yo soy Jehová tu Dios [Elohim], que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. No tendrás dioses ajenos delante de mí.”
Ya que la misma palabra se usa para el Dios verdadero y para dioses falsos, los traductores de la Biblia usaron simplemente una “D”mayúscula y pusieron la palabra “Dios” en forma singular cuando el contexto habla del único Dios verdadero, para evitar confusión. Para repetir, los traductores de la Biblia siguieron las reglas de la gramática hebrea cuando pusieron la palabra Elohim en el singular cuando se refiere al Dios verdadero; en el versículo de arriba, los pronombres usados con Dios son singulares (“yo,” y “mí”) y la forma del verbo de la palabra en hebreo traducida como “saqué” es también singular. Estas indicaciones gramaticales requieren que la palabra Elohim sea traducido como singular aquí, y así consistentemente a través del Antiguo Testamento cuando se refiere al Dios verdadero.
En un puñado de casos Elohim se usa con el pronombre plural, “nosotros.” Por ejemplo, leemos en Génesis 1:26: “Entonces dijo Dios [Elohim], hagamos al hombre a nuestra imagen” (vea también Génesis 3:22; 11:7; Isaías 6:8). Así, Elohim comunica la unidad del único Dios, y también permite la pluralidad de Personas Divinas como expresado en la doctrina cristiana histórica de la Trinidad. Tal expresión solo se encuentra en el Israel monoteísta y no se encuentra en los idiomas de cualquiera de sus vecinos semíticos politeístas.3
Jehová/Yahweh. Esto es el nombre personal del Dios de la Biblia y habla de Él como el santo Dios auto-existente quien odia el pecado pero proporciona redención. Se usa 5,321 veces en el Antiguo Testamento.4 Hay eruditos modernos que creen que la palabra “Yahweh” se aproxima más a la pronunciación apropiada, pero esto viene siendo punto estilístico y no afecta el texto bíblico.
Adonai. Esta palabra significa “Soberano,” o “Amo,” y acentúa el Señorío de Dios. Se usa más de 300 veces en el Antiguo Testamento como una designación para Dios.5 Aparece en la Biblia como “Señor”. Como en el caso con Elohim, Adonai es una forma plural especial. En tal forma plural siempre se refiere a Dios.6 La forma singular, Adon, se acostumbra usar para designar a hombres que son señores sobre otras personas. Una excepción rara donde una forma singular para el Señor (Adona) se usa para Dios será discutida luego.
Exodo 23:17,19 ilustra cómo los nombres diferentes para Dios en hebreo se usan dentro del texto bíblico:
“Tres veces en el año se presentará todo varón delante de Jehová el Señor [Adonai]. Las primicias de los primeros frutos de tu tierra traerás a la casa de Jehová tu Dios [Elohim].”
¿Son Elohim y Jehová Dioses Separados?
La Biblia usa los nombres Elohim, Jehová, y Adonai intercambiablemente para el único Dios verdadero, junto con combinaciones de estos nombres. También se utiliza varios otros términos que ocurren con menos frecuencia. De hecho, uno de los nombres de Dios en el Antiguo Testamento es Jehová-Elohim. Se traduce en nuestras Biblias como “Jehová Dios” y literalmente significa “Jehová es Elohim,” o “Jehová es Dios.” (Jehová-Elohim se traduce Jehová Dios 20 veces en Génesis 2-3, y hay docenas de otros ejemplos en el Antiguo Testamento).
Ya que el nombre Elohim es una palabra hebrea general para “Dios” y se utiliza también para referir a los dioses falsos de los vecinos paganos de Israel, nosotros tenemos la proclamación en las Escrituras bíblicas que Jehová es nuestro Elohim. Es una proclamación que Jehová es el único Dios verdadero.
Hay más que 700 versículos en el Antiguo Testamento que demuestran que Jehová y Elohim (Dios) son el mismo Dios. Muchos de estos versos expresan también que Jehová es el único Elohim. Algunos ejemplos siguen.
Isaías 43:10,11. Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios [Elohim], ni lo será después de mí. Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve.
En estos versos hay varias cosas que Dios quiere que sepamos, creamos, y entendamos: (1) hay un sólo Dios (Elohim) y Jehová es ese único Dios verdadero. (2) no había Elohims formados antes de Jehová. Esto significa que Jehová no tiene un Padre. O sea, ningún Dios (Elohim) lo precedió, Él no fue procreado o engendrado. (3) No habrá Elohims formados después de Jehová. Algunos dicen que Isaías 43:10,11 habla acerca de ídolos. Pero eso no puede ser verdad, pues ciertamente ha habido ídolos y dioses falsos creados y venerados desde que este pasaje fue escrito. Por lo tanto, cuándo Dios dijo que no habría dioses formados después que él, debe significar ningunos Dioses verdaderos y actuales.
Isaias 44:6,8. Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios [Elohim]. ... No temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antigüedad, y te lo dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios [Elojim] sino yo. No hay Fuerte; no conozco ninguno.
La proclamación enfática “Así dice Jehová” en el versículo de arriba, nos llama la atención. Los puntos siguientes se hacen como declaración autoritaria: (1) Jehová es el primer Elohim y el último Elohim. Puede haber sólo un primero y sólo un último. Otra vez, esto excluye la posibilidad de cualquier otros Dioses que existen a través de toda la eternidad pasada y toda eternidad futura. También muestra de nuevo que Jehová y Elohim no son Dioses diferentes. (2) Jehová es el Único Dios (Elohim) que existe. Esto otra vez excluye la posibilidad de otros soberanos que existen. (3) Ninguna persona razonable desafiaría el intelecto de Dios. Cuándo Él dice que Él no sepa de algo, esto ciertamente no implica ninguna limitación en el alcance ni la capacidad de Su conocimiento. Al contrario, cuando Dios dice que Él no sabe de algo, nosotros podemos estar seguros que esto significa que la cosa no existe. Así que está claro que cuándo Dios dice que El no sabe de cualquier otros Dioses es porque ellos no existen. De este modo estos versículos afirman en los términos más claros que otros Dioses no existen, ni existirán, a través de toda tiempo y espacio, en este universo o cualquier otro.
Deuteronomio 6:4. Oye, Israel: Jehová nuestro Dios [Elohim], Jehová uno es.
Note la palabra “uno” en este verso. Se debe notar que hay dos palabras para “uno” en hebreo: echad y yachid. Echad, la palabra que se usa aquí, “pone énfasis en la unidad mientras reconoce diversidad dentro de ese unidad.”7 Por ejemplo, nosotros tenemos un ejército, pero dentro de ello hay muchos miembros. La unidad descrita en este versículo no sugiere “unidad de propósito,” sino la idea que hay un solo Ser. Se pudo haber usado la palabra yachid para designar “uno” que no permite una pluralidad dentro de algo singular.
A base de esto se hace las siguientes conclusiones: (1) Jehová y Elohim son el mismo Dios. (2) Aunque hay un sólo Dios, una pluralidad de Personas divinas dentro de ese único Ser es sugerido dentro del Antiguo Testamento.
Salmo 110:1 Jehová dijo a mi Señor [Adona], Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.
Una pluralidad de Personas divinas dentro del Dios único es exactamente lo que encontramos en este verso. Por siglos se ha reconocido universalmente tanto por los judíos como por los cristianos que esto es un salmo Mesiánico. Mateo 22:41-46 muestra que los judíos en el día de Jesús entendieron que el “Señor” (Adona) en Salmo 110:1 se refería al Mesías. Lea Hechos 2:32-36 y Hebreos 1:13 y usted verá que el Nuevo Testamento claramente presenta al Salmo 110:1 como una invitación por Dios el Padre (Jehová) a Su Hijo, Jesucristo (“Señor”/Adona) a que se siente a Su diestra. Hacemos las siguientes observaciones:
Note que Jehová dirige la palabra a Adona (una forma singular de Adonai). Como se mencionó anteriormente, cuando la palabra ‘Señor’ es usado para Dios generalmente se escribe en la forma plural (Adonai), lo que está en armonía con la doctrina cristiana histórica de la naturaleza tri-una de Dios (Trinidad). En este versículo Jehová se dirige a una Persona específica dentro de la Trinidad, así que él usa la palabra singular para Señor. De hecho, Dios esta hablando con Dios, o para tomar la perspectiva del sermón del Apóstol Pedro en Hechos 2:32-36, el Padre dirige la palabra a Su Hijo pre-incarnado, Jesucristo.
Sin embargo, esto señala una contradicción mayor entre la doctrina Mormona y la Biblia. Según la Iglesia SUD, Elojim se refiere al Padre y Jehová se refiere a Jesús, y estos son dos Dioses distintos. En las palabras del Presidente Mormón Spencer W. Kimball, “hay tres Dioses: el Padre Eterno, Elohim, a quien oramos; Cristo o Jehová, y el Espíritu Santo.”8 También, en un ensayo doctrinal mormón, llamado “El Padre y el Hijo: Una Exposición Doctrinal de la Primera Presidencia y los Doce”, encontramos esta enseñanza, “Jesucristo, a quien también conocemos como Jehová, fue el poder ejecutivo de Elohim el Padre en la obra de la creación” (Articulos de Fe, 1980, p. 513).
Como nosotros hemos visto, los nombres usados para hablar de Dios en la Biblia no designan dos Dioses distintos, sino un solo Dios. En este punto la enseñanza de la iglesia mormona van en contra de la Biblia, y lo revela como algo completamente falso.
La Conclusión Ineludible
Como hemos visto de las Escrituras del Antiguo Testamento arriba, es completamente errado decir que Elohim, Jehová, y el Espíritu Santo son Dioses distintos. La Biblia expresa enfática y repetidamente que hay sólo un Dios, y declara que Elohim es Jehová, y usa los nombres Elohim, Jehová, y Adonai intercambiablemente. La Biblia enseña también que el Padre es Dios, el Hijo es Dios, y el Espíritu Santo es Dios (Hechos 5:3,4). La conclusión impactante pero ineludible es que Dios es Tri-uno en Su naturaleza. Cuán bondadoso es que El ha bajado a revelarse a nosotros en Su Palabra infalible. Cuán crucial que interpretemos Su Palabra correctamente.
NOTAS
1. Jack B. Scott, s. v. “elohim,” en Theological Wordbook of the Old Testament [Libro Teológico del Antiguo Testamento, 2 vols. (Chicago: Moody Press, 1980), 1:44.
2. Ibid.
3. Ibid.
4. J. Barton Payne, s. v. “Yahweh,” en Theological Wordbook of the Old Testament, 1:210.
5. Robert L. Alden, s. v. “adon,” en Theological Wordbook of the Old Testament, 1:13.
6. Ibid.
7. Herbert Wolf, s. v. “Echad,” Theological Wordbook of the Old Testament, 1:30.
8. Faith Precedes the Miracle [La fe precede al milagro], p. 85.